La actividad
se desarrolló, tal y como estaba programado en una semana. Se sucedieron
algunos cambios, los cuales, explicaremos a continuación.
En primer
lugar y en relación a la primera actividad programada como actividad de
motivación, hubo algunos problemas derivados del sistema operativo de linex
colegios implantado en Extremadura, ya que existen algunas nuevas restricciones
con las que me encontré ese mismo día, puesto que anteriormente se había podido
acceder a estas páginas, en concreto a youtube, desde donde estaba planteada
visualización del cuento de Disney sobre “El pato Donald en el museo de los
inventos”, con lo cual ante la posibilidad de retrasar la actividad un día más
para poder visualizar el cuento, se decidió descargar el cuento y visualizarlo
posteriormente, así se decidió iniciar
la actividad ese día con la otra actividad programada que era conocer la
historia de Dino, una de nuestras mascotas de clase.
Pues bien,
se relató la historia, “bien condimentada” sobre nuestra mascota y es que
acercándose el verano y previendo que se iba a quedar sólo en clase, puesto que
todos los niños estarían de vacaciones, había pensado en visitar a su familia,
puesto que además hacía mucho tiempo que no los veía. El problema venía porque
para realizar el viaje necesitaba un vehículo “especial”, puesto que su familia
vivía en América, (ya vimos los continentes el trimestre anterior) y por lo
tanto, debería ser un transporte que pudiera viajar por tierra, mar y aire,
para ello vimos el recorrido que debía hacer a través de un mapa que tenemos en
el aula, del trimestre anterior. Por lo tanto, necesitaba que le ayudáramos,
puesto que sabía que nuestra clase sabría cómo hacerlo.
A partir del
planteamiento del problema, y en asamblea se realizó una lluvia de ideas en
donde se generaron unas ideas muy originales sobre los distintos medios de
transporte que existían y que conocían, los cuales se fueron anotando en la
pizarra, incluso haciendo dibujos de ellos, clasificándose en transporte de
tierra, mar y aire. Así se pudo constatar la información inicial que poseían sobre
estos aspectos.
Así
realizamos una nota en el ordenador de aula para enviársela a los padres,
solicitando la ayuda para conocer más aspectos sobre estos medios.
Posteriormente,
y una vez que iban trayendo la información solicitada, construimos un mural
para ir añadiendo las investigaciones que habíamos hecho en casa.
Fuimos
pegando y explicando cada uno de manera individual, lo que habíamos averiguado
sobre los distintos medios, contribuyendo así a saber cuándo se inventó y quien
lo hizo, así como sus primeras fotografías, añadiendo algunas posibilidades
para construir un nuevo vehículo para Dino.
Por
supuesto, Dino, escuchaba atentamente el relato de todos ellos. Así mismo se
generó una dinámica de preguntas sobre algunos de ellos que despertaban
interés, lo que hizo de la actividad un momento de conversación guiada,
respetando las normas de participación: pedir la palabra, respetar turnos,
escuchar con interés….
De la misma
manera, a través de esta actividad, también vimos cómo era el proceso de creación
de un invento: primero pensar una necesidad, después diseñarlo, mediante un
dibujo y posteriormente crearlo.
Una vez vistos los diferentes
vehículos que existían y cogido algunas ideas sobre cómo podría ser el vehículo
que deberíamos diseñar para Dino, decidimos formar 5 grupos de alumnos,
equilibrados, para que a través de la argumentación y la defensa de las ideas
propias y respeto por las demás, se pusiesen de acuerdo en diseñar el vehículo
que necesitábamos.
En primer
lugar, debían decidir en el grupo, quien iba a dibujar, pues debía ser uno sólo
del grupo. Los demás deberían aportar sus ideas de cómo les gustaría que fuese
el transporte. Las deliberaciones fueron difíciles, puesto que en estas edades
no es demasiado fácil argumentar la posición y algunos querían imponer su
voluntad, así que hasta que no se pusieron de acuerdo y se convencieron unos a
los otros sobre qué función realizar dentro del grupo, no se inició. He de decir,
que algunos grupos, enseguida se pusieron de acuerdo, puesto que en ellos había
líderes claros de clase, con lo cual hubo pocas discusiones, pero en otros, no
fue fácil llegar a un acuerdo.
La verdad es
que fue sorprendente la imaginación que desbordaron, aportando ideas de cómo
hacer funcionar los aparatos y de cómo dibujarlos.
Una vez
realizado un diseño por cada grupo, se utilizó la fotocopiadora para hacer
copias de cada uno de los 5 dibujos para que todos, a la vez, pudieran
participar del invento, dibujándolo como quisieran y añadiéndoles algunos otros
elementos que considerasen oportuno y que les gustaría que formaran parte del
diseño del nuevo invento. Así, manteniendo los mismos grupos, se repartió un
diseño a cada uno para terminar de decorarlo.
A partir de
aquí, expusimos los trabajos en el aula y fuimos apuntando en una pizarra los
votos de cada uno de ellos para elegir el que más nos gustaba a la mayoría, el
cual debíamos construir para Dino.
Poco a poco
y a ratitos, cada uno fue aportando su grano de arena al invento y al final el
resultado, fue un vehículo que cumplía con los requisitos que nos había pedido
Dino: podría ir por tierra, pues tenía ruedas, por mar, porque tenía remos y
por aire, porque tenía alas para volar. Metimos a Dino en él para ver qué le
parecía y quedó muy contento, dando las gracias y un beso personalmente a cada
uno de ellos.
En
definitiva, la actividad desarrollada, ha contribuido, de manera general, a
conseguir determinados aprendizajes, que de otra manera no hubieran sido ni tan
significativos ni tan motivadores como este diseño de aprendizajes basados en
problemas.
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